El gobierno local censura que CSIF, CGT y SIP no se presenten en un nuevo intento de sentarse en la mesa de negociación del Plan de Ajuste.
“Volvemos a apelar a la responsabilidad de los representantes sindicales de CGT, CSIF y SIP y a recordarles que el conjunto de la plantilla municipal no se merece que primen otros intereses sobre los del conjunto de trabajadores municipales, que es lo que se deduce de sus actuaciones”, sostiene el gobierno local en un comunicado remitido a los medios este mediodía, el enésimo de la semana en referencia a la fallida negociación sobre el Plan de Ajuste.
En el intento de este mismo viernes, CGT, CSIF y CGT no se han presentado a la mesa de negociación, mostrando así su descontento con el Plan de Ajuste elaborado por el gobierno local, aprobado este jueves en pleno con los votos de PSOE y Ganemos, y también con factores como la intención de grabar en vídeo las reuniones, a lo que se vienen negando desde principios de semana.
La aplicación de las 37,5 horas semanales a los trabajadores municipales es la principal piedra en el camino del gobierno local, que ha visto cómo los sindicatos mayoritarios SIP y CGT se han negado en rotundo. “El gobierno municipal quiere dejar patente y clara la voluntad negociadora, a fin de que entre todos se pueda determinar la forma mejor de aplicar la ampliación de la jornada laboral de la plantilla municipal impuesta por ley y la aplicación objetiva del complemento de productividad”, apunta el ejecutivo socialista, que alaba la “voluntad negociadora” de CCOO, ATMJ y UGT.
“Todos los empleados y empleadas públicos están obligados, por ley, a trabajar 1.642 horas al año, pero hay muchas formas de repartirlas y nuestra voluntad es determinar aquella que sea más beneficiosa para los intereses de la plantilla municipal”, indica el gobierno local, que asegura que para él “es muy importante la conciliación de la vida laboral y familiar y ahora tenemos la ocasión de implantar, entre todos, nuevos modelos de jornada laboral que la permita”.
La intención de crear un reglamento de productividades, del que los sindicatos más críticos con el gobierno aseguran que no saben en qué consistirá, es la otra piedra de toque de este entramado. “Nuestra voluntad es poder llegar a un acuerdo sindical que permita dicha regulación, conjugando los requisitos legales de dicho complemento con los intereses de la plantilla municipal”, apuntan el Ayuntamiento.
La alcaldesa, además, en declaraciones a La FM, asegura que están denunciando todas las conductas incívicas producidas esta semana en torno a la negociación del Plan de Ajuste –con alguna agresión incluida–y que abrirán "todos los expedientes que se tengan que abrir". "Vamos a ser implacables, nadie se puede ser saltar las normas y menos poniendo en peligro y en riesgo a otras personas", apunta.
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