Lola Rueda, presidenta del Consejo Social de Jerez, se define como "una gran emprendedora" y apuesta por "empoderar a las personas" para que vean "qué pueden hacer por la ciudad", y no al revés.

Lola Rueda se define a sí misma como “una gran emprendedora”. Su vida profesional siempre ha estado relacionada con el turismo, pero en 2008 la crisis se la llevó por delante. O eso creía. Tenía “un buen puesto”, pero le tocó reinventarse. “Vi que había que incorporarse a una nueva sociedad, a una nueva manera de hacer las cosas”, dice en el preámbulo de una entrevista realizada en un pequeño despacho de la delegación de Impulso Económico, conocida como la Moncloíta, habilitado tras ser nombrada presidenta del Consejo Social de la Ciudad. Un par de cuadros, una mesa, un par de sillas y un ordenador es todo el mobiliario que tiene en las cuatro paredes en las que organiza los primeros pasos de una entidad que se ha llevado dos años sin actividad conocida y que ahora forman 21 consejeros procedentes de entidades sociales, empresariales, sindicales o vecinales. “Me apasionan las personas, ayudar, porque cada vez tengo más habilidades, algunas de las que se denominan blandas, como la empatía, la inteligencia emocional, la escucha activa… estoy abierta a ideas innovadoras”, comenta Rueda, presidenta también de la red profesional Mujeres Imparables, que le valió para ganar el Premio Ciudad de Jerez 2015 a la Iniciativa.

“Empecé a viralizar ciertos hashtag (etiquetas) y vi que #MujeresImparables tenía más de un millón de impactos en Twitter. Esto significaba que podíamos impulsar una iniciativa desde Jerez al mundo. Me rodeé de mujeres imparables de Jerez, y luego llegaron más de la provincia de Cádiz, hasta que nos reunimos y decidimos formalizar esto en un encuentro imparable que tuvo una gran repercusión”, dice Lola Rueda, que reivindica el gran papel de la mujer en el ámbito profesional. “Muchas de mis compañeras en el sector turístico, que tienen mucho talento, son invisibles. Me consideraba con el deber de visibilizar a estas compañeras. El gran reto de la mujer profesional del siglo XXI es visibilizar su labor y eso Mujeres Imparables lo está consiguiendo”.

¿En qué se va a notar la mano de la que es la primera mujer que preside el Consejo Social?

En la sensibilidad que me caracteriza, la amabilidad, la cordialidad, la escucha activa. Esta inteligencia emocional que se va adquiriendo con los años, de saber no solo qué quieres tú, sino qué quiere la otra persona. Cuando me lo propuso la alcaldesa dije: ¿Qué va a pensar el consejo? No puse ninguna condición, solo que iba a tener mi compromiso, que es algo que falta muchísimo en la sociedad. Esto no es para que yo tenga protagonismo, es para que Lola Rueda consiga, como presidenta, que el Consejo Social sea útil a la ciudad. El día de la toma de posesión sentí las miradas de: ¿Qué va a hacer ella aquí? ¿Será capaz? También me decían mucho que iba a durar poquísimo…

"Si alguien creía que iba a venir aquí arrasando y quitando lo que había, se equivocaba"

¿Por qué no la veían capaz o por el desgaste que supone un cargo así?

Es una entidad muy importante, que tiene mucho peso, pero que llevaba dos años parada. Si alguien creía que iba a venir aquí arrasando y quitando lo que había, se equivocaba. Nos caracteriza la empatía, entendemos que todos y todas tenemos que cooperar y eso la alcaldesa lo sabía. Los que no lo sabían eran los miembros del Consejo. En mi breve discurso en la toma de posesión lo único que dije fue que quería generosidad por parte de todos y de todas. Generosidad y compromiso. Veía que al Consejo le faltaban entidades. Estaba muy bien representado lo económico y lo profesional, pero lo social no. Entonces propuse nuevas incorporaciones, para que se consensuaran entre todos. Pensamos que la Universidad de Cádiz, por ejemplo, no podía estar fuera. No podíamos dejar fuera tampoco a Cáritas. Está la federación de vecinos La Plazoleta 2.0; Faecta (Federación Andaluza de Empresas Cooperativas de Trabajo Asociado), porque el cooperativismo es muy importante; o Accem (ONG que trabaja con inmigrantes).

¿Ya están todos los miembros que deberían estar?

Todos. Hay más mujeres que antes, y estoy muy contenta por esa razón. Nos reunimos el 1 de diciembre, sabíamos que era un antes y un después, había que constituir la comisión ejecutiva, las comisiones de trabajo y empezar a trabajar. La UCA ha aceptado la vicepresidencia, tenemos un comité ejecutivo que está funcionando, estamos dando grandes pasos en nuestras normas internas de funcionamiento. La primera comisión que se ha constituido y ya se ha celebrado es la de Economía y Empleo, que ha emitido un informe sobre ordenanzas fiscales. Mientras que arrancaba, buscamos una imagen para el Consejo Social, que es ésta —dice mostrándola en el ordenador—, la ciudad conectada. También tenemos la nueva web y creamos una cuenta de Twitter, donde vamos a ir nombrando a cada consejero con su fotografía, contando su experiencia. Los ciudadanos tienen derecho a conocer quiénes somos, este no es un trabajo de puertas para adentro.

Quizás debería ser todo lo contrario…

Exactamente. El Ayuntamiento y los grupos políticos tienen sus obligaciones, nosotros no solo debemos recoger las propuestas que vengan de ellos, tenemos que tomar iniciativa y emitir informes con lo que pasa en la ciudad y con lo que nos preocupa. Hay muchas cosas que el día a día no les permite ver y a nosotros sí. Yo soy de calle, de estar con emprendedores y emprendedoras, sé lo que pasa, sé cuales son sus necesidades, y eso es lo importante, que esas necesidades se trasladen a los consejeros. Si trabajamos de esa manera, intentando que todo enriquezca al Consejo, seremos útiles.

¿Qué recoge ese primer informe del que hablaba?

Hay ordenanzas fiscales que nos vienen dadas porque hay que seguir una regulación, y acatar la ley, ahí poco tenemos que decir. Pero sí podemos proponer, nos preocupa que haya algunos recortes en los Presupuestos y queremos impulsar medidas. ¿En qué sentido? Tiene que haber un plan municipal de subvenciones que recoja la parte social. Entendemos la situación del Ayuntamiento, pero hay que buscar medidas alternativas. Hay proyectos que no necesitan presupuesto, pero sí voluntad.

¿Habla de regular las subvenciones?

Hay muchas entidades que necesitan ayuda. Entiendo que no haya presupuestos, pero hay otras vías para hacer las cosas. Hay vías para hacer que esas entidades sociales reciban ayudas y el Consejo se va a volcar. Hay otras tres comisiones, además de la de Economía y Empleo, que son la de Formación y Emprendimiento, Cultura y Desarrollo Territorial e Integración Social. Esas mesas van a trabajar, no solo esperando que le vengan las propuestas, quiero que hagamos una valoración de la ciudad y qué podemos hacer. Lo importante es que el Consejo también proponga.

El anterior Consejo elaboró un plan de empleo local que era “inviable legalmente”, ¿tienen pensado trabajar en este sentido?

Por supuesto que vamos a trabajar medidas para el empleo. Hay muchas iniciativas pero hay que consensuarlas de alguna manera. En empleo todo se queda en cifras y es mucho más, hay que mirar a las personas. Los protagonistas son las personas. Tenemos que ver cuales son sus necesidades. No hay que hacerles dependientes, para nada. Que no esperen a que lleguemos para darles trabajo.

"Tenemos que abandonar esa actitud de: ¿para qué voy a moverme si no voy a conseguir nada? Jerez nos necesita más que nunca"

Darles herramientas para que encuentren empleo.

Exactamente. Decirles: estas son vuestras herramientas, seguid hacia delante, no importa que os tropecéis. Hay que levantarse, hay que seguir adelante y hay que buscar personas a vuestro alrededor que os puedan asesorar. A las personas hay que hablarles de oportunidades. El fracaso es parte del camino, pero hay que empoderar a las personas, a hombres y mujeres, para decirles que sí se puede. Cuando una persona está convencida de que quiere hacer algo es imparable.

¿Cree que somos demasiado dependientes de la Administración de turno?

Siempre hablamos de compromiso, de participación ciudadana, pero a la ciudadanía me gustaría decirle que la participación ciudadana no es solo para quejarse, el compromiso debe ser: qué puedo hacer yo por Jerez. ¿Por qué no cambiamos esa mentalidad de dependencia?

Justo eso iba a preguntarle, ¿cómo se cambia?

Con ejemplos reales, que tengan credibilidad, algo que se ha perdido en el camino. Es importantísima la credibilidad. ¿Qué hacemos ahora desde el Consejo? Tenemos que ser ejemplo para la ciudadanía de que sí hacemos cosas distintas, de que sí se puede, de que hay una presidenta que por primera vez está proponiendo nuevas formas de hacer las cosas, que no significa borrar, quitar, suprimir, sino que significa sumar. Es imprescindible que vayamos poniendo referentes a la ciudadanía, personas que sí lo consiguen. Tenemos que abandonar esa actitud de: ¿para qué voy a moverme si no voy a conseguir nada? Jerez nos necesita más que nunca. Por favor, hagamos algo.

¿Qué objetivos se marca como presidenta?

El más importante es conseguir que los ciudadanos vean que somos eficaces, útiles, que podemos trasladar el sentir de la ciudad al Ayuntamiento y poder influir en medidas para que la ciudad mejore. No podemos aportar dinero, pero sí ideas, proyectos, creatividad. Todos tenemos nuestras obligaciones y nuestros trabajos, esto es algo que hacemos altruistamente, pero a partir de ahí tenemos un compromiso con la ciudad.

Hace más de 10 años que no se publica el documento 'Jerez: Economía y Sociedad' que elaboraba el Consejo Social, justo desde el inicio de la crisis, quizás cuando más falta hacía. ¿Piensan rescatarlo?

Vamos a hacer una memoria anual. Las cuatro comisiones de trabajo trabajarán en esa línea para aportar una memoria en la que podamos decir al Ayuntamiento de Jerez qué podemos proponer. Quiero que Jerez sea la ciudad amable, que fuera una ciudad por la que se pudiera pasear, donde la gente no estuviera tan crispada, donde fuéramos capaces de crear. No tenemos recursos porque es verdad que tenemos un Ayuntamiento endeudado, pero eso no significa que no seamos referentes, no solo por el vino, el flamenco o los caballos, somos un referente en creatividad, lo estamos demostrando con proyectos imparables. ¿Por qué no nos lo creemos?

"Los jerezanos tenemos la gran capacidad de juzgar todo lo que se nos pone por delante" 

Muchas veces el mayor enemigo del jerezano es el propio jerezano, ¿no cree?

Muchos lo único que dicen es: Esto va fatal. Esto es una mierda. Qué sucio. Pero, ¿tú estás tirando el papel en el suelo? ¿Tienes perro? ¿Cuántas veces has recogido la caca del suelo? Si tuviéramos un mínimo de capacidad para comprender que todos somos Jerez… Nos tenemos que concienciar. Por supuesto que el Ayuntamiento tendrá que poner los medios para que Jerez sea una ciudad amable en todos los sentidos, pero si todos cuidáramos un poquito mejor nuestra ciudad a lo mejor tendríamos menos quejas. Entiendo que hay cosas mal pero no me voy a instaurar en ese discurso.

¿Qué motivos hay para el optimismo?

Hay muchísimos. En el momento en que cambiemos el chip vamos a conseguir grandes cosas. Tendré un recorrido de cuatro años en el Consejo Social y mi única finalidad es que cuando terminemos se diga que sirvió para algo. Que haya arrancado ya es un gran motivo de ilusión para Jerez. Hay que estar presentes en la ciudad, hablar bien en las redes sociales. Muchas veces se critica sin estar informado. Quizás desde el Ayuntamiento se deba comunicar mejor, pero vamos a emitir menos quejas en redes, vamos a impulsar todo lo bueno que está pasando aquí. Todo el mundo tiene derecho a dar su opinión, pero si no contribuye a mejorar nuestro entorno... mejor mírate a ti mismo, mira lo que tú haces en el día a día, y luego hablas. Tenemos la gran capacidad de juzgar todo lo que se nos pone por delante.

Sobre el autor:

Foto Francisco Romero copia

Francisco Romero

Licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla. Antes de terminar la carrera, empecé mi trayectoria, primero como becario y luego en plantilla, en Diario de Jerez. Con 25 años participé en la fundación de un periódico, El Independiente de Cádiz, que a pesar de su corta trayectoria obtuvo el Premio Andalucía de Periodismo en 2014 por la gran calidad de su suplemento dominical. Desde 2014 escribo en lavozdelsur.es, un periódico digital andaluz del que formé parte de su fundación, en el que ahora ejerzo de subdirector. En 2019 obtuve una mención especial del Premio Cádiz de Periodismo, y en 2023 un accésit del Premio Nacional de Periodismo Juan Andrés García de la Asociación de la Prensa de Jerez.

...saber más sobre el autor

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios

No hay comentarios ¿Te animas?

Lo más leído