La Policía Nacional ha detenido en Jerez a un joven de 20 años de edad como presunto autor de seis robos con violencia e intimidación, un delito de daños y otro de atentado contra agente de la autoridad. Una vez puesto a disposición judicial, el titular del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia decretó su ingreso en prisión.
Según ha explicado la Policía en una nota, los robos se perpetraban con intimidación a las víctimas, en su mayoría menores de edad, con una navaja y abordándolas cuando caminaban por la calle solas para apoderarse de los efectos de valor que portaban.
La investigación se inició cuando se presentó la primera denuncia tras el primer robo en las inmediaciones de la Avenida de Nazaret. Días después se recibió otra denuncia presentada por un joven que manifestó que una persona, en compañía de un menor, le asaltó en las inmediaciones del barrio de Santiago.
Según ha señalado la Policía, en los días posteriores, el investigado supuestamente volvió a actuar contra otras dos chicas menores de edad y una mujer de avanzada edad. Así, el último robo presuntamente lo cometió el 21 de mayo en las inmediaciones del Paseo de las Delicias, donde armado con un cuchillo de cocina una joven de 16 años fue asaltada para arrebatarle todos sus objetos de valor.
En ese robo, un agente de la Policía Nacional fuera de servicio destinado en la comisaría de El Puerto de Santa María y que paseaba por la zona se percató de lo ocurrido y emprendió la persecución a pie hasta el interior de un bloque de viviendas donde el presunto autor acometió con el cuchillo contra el policía, logrando saltar un vallado cercano y abandonando el lugar a la carrera sin ser detenido.
No obstante, según ha destacado la Policía, el testimonio del agente fuera de servicio ha sido crucial para descubrir la identidad del presunto autor de los robos investigados, ya que pudo reconocerlo debido a que observó al agresor a cara descubierta.
Así, fruto de las gestiones realizadas en la noche del 29 de mayo, el investigado fue localizado en el interior de un vehículo en la calle Ermita de Oliva. En el momento de la detención el joven opuso una fuerte resistencia contra los agentes tratando de arrancar el turismo para huir, llegando a morder en la mano a uno de los policías que trataba de reducirlo.
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