'Bravo cinco': todo en orden

450 voluntarios de Cruz Roja y 20 vehículos están movilizados en el Circuito de Jerez y sus alrededores con motivo de la celebración del Gran Premio. En 2015, con más de 243.000 aficionados en el trazado durante los tres días de competición, realizaron 429 asistencias.

El año pasado más de 243.000 personas pasaron por el Circuito de Jerez los tres días que duró el Gran Premio de España. Buena parte de culpa de que todos disfrutaran del evento la tuvo el personal de Cruz Roja, encargado de velar por el bienestar de los aficionados. Entonces tuvieron que realizar 429 asistencias.

En 2016 son 250 los voluntarios y 20 los vehículos que conforman el dispositivo de la motorada tanto en el trazado jerezano como en la propia ciudad. En Cádiz es de largo el evento deportivo que más personas mueve de Cruz Roja y también de los más importantes a nivel nacional. De hecho, moviliza a voluntarios de todas las provincias andaluzas. Quizás, y fuera del ámbito deportivo, sólo en la provincia la Operación Paso del Estrecho se podría equiparar en cantidad de personal necesario.

Desde hace ocho años, Javier Gil Guerra se encarga de que el dispositivo funcione como un reloj. Entró en la asamblea local de Jerez en el año 92 como voluntario y ahora es el coordinador provincial. “Tenemos muchos perfiles: médicos, enfermeras, técnicos de emergencia, conductores, socorristas, psicólogos, operadores de radio, responsables de comunicación… Quizás la punta de iceberg de este engranaje, lo más visible, sea la relativa a la atención sanitaria, pero detrás hay toda una ingeniería humanitaria para que esto sea posible”.La cobertura de Cruz Roja es amplia. Entre el Circuito y sus alrededores hay siete dispositivos. El principal, el denominado Bravo cero, es el Centro de Valoración o Puesto de Mando Avanzado (PMA). Situado a la altura de Torremelgarejo, desde aquí se comunican los avisos y se valoran los recursos a emplear. Aquí encontramos, además, el llamado Centro Móvil de Coordinación (CMC), un tráiler dotado con conexiones vía satélite en el que operadores de Cruz Roja coordinan todo el movimiento de ambulancias. A partir de ahí están Bravo 1 (en la Tribuna X1); Bravo 2 (Curva Expo 92); Bravo 3 (Dry Sack); Bravo 4 (Peluqui); Bravo 5, junto a las puertas principales del Circuito y Bravo 6, en la zona de acampada.

De todas ellas, Bravo cero, cinco y seis permanecen en funcionamiento las 24 horas del día y en los dos últimos hay un equipo destinado a la atención de los usuarios, otro destinado a los traslados en ambulancia y otro de socorristas realizando vueltas de reconocimiento. Además, a todos estos se añaden los dispositivos que se instalarán en la avenida Álvaro Domecq durante la exhibición de freestyle la tarde del sábado 23 y horas después durante el concierto que se celebrará en la plaza de toros. Pero aún hay más. En la provincia no sólo el Gran Premio va a movilizar a miles de personas, también eventos como el Trebufestival, en Trebujena, que obligará a mantener un equipo formado por una ambulancia, una enfermera y un socorrista durante 18 horas entre el sábado y el domingo.

“Para nosotros este fin de semana es mortal”, afirma Andrés Ramírez, director provincial de Socorro y Emergencia, quien junto a Rafael Plaza, su adjunto, se encarga de la gestión del dispositivo desde el interior y exterior del Circuito. “Tal vez no haya ninguna asamblea que sea capaz de organizar un preventivo de estas características. Son muchísimos recursos, dotaciones y voluntarios”, explica Plaza.

Dependiendo de las horas del día y la ubicación, Cruz Roja atiende diferentes patologías. Si el tiempo es bueno y el sol aprieta son habituales los golpes de calor. Las picaduras de insecto y las alergias también son comunes. Y por la noche, en la zona de acampada y si el personal se lo pasa bien, lo que abundan suelen ser las intoxicaciones etílicas. En cuanto al casco urbano de Jerez, los accidentes se han reducido considerablemente en los últimos tiempos. “Afortunadamente ya no se dan esos datos terroríficos de hace años, cuando las cifras de accidentados y fallecidos eran altas. Además estamos coordinados con Policía Nacional, Local, 061 y 112”, incide Javier Gil.“Esta es la única profesión en el que lo mejor que puede pasar es que no trabajemos”, apunta Lolo, voluntario con más de 400 horas en Cruz Roja. Técnico de emergencia sanitaria, a medio camino entre celador y enfermero, explica, también es conductor de ambulancia. Señala que hasta el Circuito se han desplazado tanto las denominadas de Servicio Vital Básico (SVB) como las de Servicio Vital Avanzado (SVA), las popularmente conocidas uvi móvil, más equipadas que las primeras y destinadas a salidas de gran urgencia.

Compañera de Lolo es Ainhoa Irribarri, 23 años, procedente de Algeciras, que está a punto de cumplir su primer año en Cruz Roja. Comenzó como socorrista pero ya ejerce de enfermera tras finalizar la carrera el pasado diciembre. Ainhoa, que trabaja desde el módulo de auxilio que se encuentra junto a los accesos principales del Circuito, reconoce que lo que más le atrajo de Cruz Roja es la diversidad de opciones que se encuentra. “Ves muchas cosas y aprendes mucho. La satisfacción personal es grande porque no sólo hago cosas como enfermera, también doy cursos de primeros auxilios, ayudo a personas en riesgo de exclusión social… Hay muchos campos y a mí me encanta picotear de todos”.

Hasta las siete de la tarde del domingo los voluntarios de Cruz Roja pondrán los cinco sentidos en la motorada. A partir de entonces tocará pensar en la Feria del Caballo, el otro gran evento de Jerez que los tendrá movilizados desde la tarde del sábado 30 de abril hasta bien entrada la mañana del domingo 8 de mayo.