Unos 275.550 alumnos inician sus estudios en un año escolar que contará con más docentes, pero todavía sin contentar la campaña de climatización.
Los despertadores empiezan a sonar en las casas, el olor a café se vuelve a mezclar con el del cacao. Las prisas, las caras lavadas, los ojos que se frotan, el sueño que se mezcla la ilusión y las ganas, los carritos sonando por las aceras, las manos cogidas de una hilera de padres y madres que caminando van hacia el centro… y, cómo no, los llantos. Llantos de no querer separarse del padre o lo madre para los más pequeños y llantos de emoción tras ver a los compañeros que hace unos meses dejaron de ver. En los centros escolares gaditanos todo estaba preparado para que los alumnos empezaran las clases como cada mes de septiembre.
Un curso que comenzaba con total “normalidad”, según apuntaba el delegado de la Junta en Cádiz, Juan Luis Belizón, tras visitar un colegio en Sanlúcar. Este año, la plantilla de docentes en toda la provincia aumenta con respecto al año pasado en 418 más, lo que hace un total de 14.410 maestros. Por el contrario, el número de escolarizados desciende, siendo 275.550 alumnos los que formen parte del sistema educativo este curso, sin contar con los universitarios entre los 848 centros públicos, centrados y privados. Unos 1.330 menos que le periodo anterior, según datos facilitados por la propia Junta de Andalucía.
Otra de las novedades en cuanto Primaria se refiere, es la implantación progresiva del francés y con tres centros nuevos en la red bilingüe. Para Remedios Palma, delegada de Educación en Cádiz, uno de los objetivos fundamentales es no solo “ofrecer una enseñanza de calidad”, sino también “otras prestaciones que aseguran la conciliación laboral y social”. En este sentido, en la provincia más de 24.000 escolares harán uso del comedor y unos 13.500 del transporte escolar. Novedosa es la creación este año de cinco Aulas Específicas para la atención del alumnado con Necesidades Educativas Especiales, sumando en totla 95 instalaciones destinadas a este ámbito. De las nuevas, una está destinada a la atención de trastornos del espectro autista y cuatro a la atención del alumnado polidiscapacitado.
El asunto de la climatización es un quizás uno de los más comentado entre padres y madres, al comprobar cómo en algunas aulas se sigue sufriendo unas altas temperaturas y solo existen dos ventiladores pequeños. Algo que ya denunció lavozdelzur.es tras la intervención en el colegio de La Unión, pero que también se dan en centros de otras poblaciones de la provincia, caso de San Fernando.
El compromiso de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía fue la de acondicionar los centros “tanto para el verano como para el invierno”, incorporando adecuadas “protecciones solares, sustitución de persianas por lamas exteriores, la elección de colores claros en las fachadas, la mejora y refuerzo de los aislamientos o la incorporación de vegetación para lograr sombras”. Sin embargo, desde Marea Verde, ya ponían el dedo en la llaga con el asunto de la climatización y criticaba las medidas anunciadas por la Junta, que “afectarán sólo a 51 centros escolares, ni el 1% del total”, por lo que desconocen “los criterios que se han seguido para la elección de los colegios”.
No obatante, las administraciones locales han puesto de su parte destinando, por ejemplo en San Fernando, 101.323 euros al pintado de exteriores e interiores de los colegios. Las tareas de arreglo de las zonas verdes comenzó el pasado 24 de agosto y en estos días se están finalizando, con un presupuesto de 11.616 euros. Algunos colegios han sido objeto de mejoras con mayor atención, caso del CEIP La Ardila, donde se ha actuado en el patio y en el revestimiento de los muros; en el CEIP Manuel de Falla, con intervención en la pista deportiva y escaleras de acceso y el CEIP Los Esteros, donde se han suprimido un muro y otros elementos adicionales de construcción para reordenar y mejorar los espacios.
El curso arranca un año más y los escolares de la provincia tiene por delante diez meses de intensos programas educativos, todavía frotándose los ojos de sueño y pensando en las vacaciones que ya se les han acabado.


