Estudiantes recogen firmas para pedir a la dirección del centro y al Ayuntamiento que no se imparta docencia en aulas con riesgo de derrumbe.
Más de dos décadas llevan la mayoría de vigas de algunas aulas de la Escuela de Arte con marcas rojas, indicativo de que hacen mella en ellas las termitas. El techo de una clase ya se cayó con un chaparrón del que todavía no se ha repuesto el centro educativo. Ahora han empezado las obras de emergencia en la zona para reparar los daños. Pero allí se siguen dando clases, pero no a cualquier precio. Alumnos de bachiller ya han iniciado una campaña de recogida de firmas para pedir al centro y también al Ayuntamiento el arreglo de los desperfectos y se niegan a entrar en aulas con riesgo de derrumbe. “No nos sentimos con ánimos para dar clases allí”, sostiene un alumno de la Escuela, que lleva unos días recogiendo firmas de sus compañeros y de estudiantes de otros cursos. “La gente colabora porque ve el estado en el que está la Escuela: las aulas colindantes tienen grietas, todas están mal”, añade.
Cuenta este alumno que hace unos días los querían obligar a asistir al aula pero se negaron. “Hay mas vigas marcadas que sin marcar”, señala. No se fían y prefieren prevenir. “La idea es que firmen todos los alumnos de la Escuela para que nos tengan en cuenta”, relata. El aula afectada por el derrumbe, de la parte que a la calle Ídolos, y algunas colindantes, llevan años con problemas de filtraciones y atacadas por las termitas, pero no es hasta ahora cuando se ha actuado.
El Ayuntamiento ya ha iniciado los trabajos de emergencia en el edificio, que tienen un coste de 21.000 euros, donde los operarios sanearán toda la zona del muro que pueda suponer peligro para buscar la parte sana del tejado. Con estas actuaciones, señala el gobierno local, “se quiere consolidar la cabeza de la parte alta del muro de la fachada, e incluirá también la comprobación del estado en que se encuentra la estructura de redes que soporta la cubierta en la zona afectada por el derrumbe”.
Los vecinos no han tenido tanta paciencia. Ya avisaron hace unos días que están estudiando denunciar al Ayuntamiento por posible “negligencia” al considerar que no se hizo nada por evitar el suceso, ya que venían avisando desde Semana Santa del mal estado de la cubierta de tejas que terminó cayéndose el pasado 13 de septiembre. El PP también pide explicaciones al gobierno local y quiere que sea el teniente de alcaldesa de Urbanismo, Francisco Camas, quien comparezca en el pleno. “Tiene que explicar por qué no se actuó de forma inmediata en el inmueble propiedad del Ayuntamiento y cuyo uso está cedido a la Junta de Andalucía”, señala Agustín Muñoz, concejal popular. El asunto llega también al Parlamento andaluz de la mano de Podemos, formación que pide "celeridad" en las actuaciones al Ayuntamiento. "Esta calle no se va a dejar morir", señalan.
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