Juan Carlos C.P. estaba de noche, sólo, en el polígono industrial del Bajo de La Cabezuela de Puerto Real, cuando algo falló. La puerta de la nave de la empresa en la que trabajaba, Ership —una naviera dedicada al transporte, almacenaje y manipulación de graneles sólidos en el sector portuario— se desprendió de su eje, y cayó sobre el trabajador, de 48 años, que falleció.
Para añadir dramatismo a la historia, para colmo fueron su mujer y su padre los primeros en encontrarlo. Extrañados de que no llegara a casa, se acercaron de madrugada hasta La Cabezuela. Este vecino de Puerto Real, contratado como eventual por la empresa, es uno de los más de 70 andaluces que, en lo que va de año, han fallecido en su puesto de trabajo —en el primer semestre eran 73, unos datos que se actualizarán a final de año—.
El asunto está siendo investigado por Inspección de Trabajo, y de momento se desconocen muchos detalles sobre el estado de la puerta de la nave, y en general sobre las particularidades del caso. “Bajo nuestro punto de vista parece que es una negligencia”, apunta Silvia Gómez, responsable provincial del Salud de CCOO, en declaraciones a lavozdelsur.es. “Habrá que comprobarlo”, agrega, “pero parece que la puerta iba en una vía, se abría como una persiana, y se salió, cayéndose encima del trabajador”.
De hecho, la Coordinadora Estatal de Trabajadores de los Puertos (CETP) ya interpuso una denuncia ante la Inspección de Trabajo por las carencias en medidas de prevención y seguridad en las instalaciones de la empresa Ership. La CETP está estudiando personarse como acusación, y sindicatos como CCOO y UGT han denunciado, y se concentrarán el próximo 27 de octubre, a las 11:00 horas, en la puerta de la Subdelegacion del Gobierno en Cádiz.
“La caída de una puerta se debe a algún fallo, algo estaba mal, y es lo que se tiene que investigar”, insiste Silvia Gómez, de CCOO, quien es prudente y espera que Inspección de Trabajo determine —suele tardar varios meses— si se cumplían todas las medidas de seguridad exigibles en la empresa. “Una vez se conozcan los resultados de la investigación, tomaremos las medidas oportunas”, dice.
“Hay muchos accidentes de trabajo que se pueden evitar, y éste parece que era uno de ellos”, agrega la responsable provincial del Salud del sindicato, que achaca este tipo de sucesos a “la falta de medidas de seguridad y mantenimiento”. Por eso desde CCOO se está recopilando información para saber qué pasó exactamente el día que Juan Carlos perdió la vida. “No entendemos por qué estaba sólo de noche”, apostilla Silvia Gómez, ya que se encontraba, al parecer, fuera del horario laboral.
La noche del accidente, de madrugada, sobre las 4:40 horas, la Policía Nacional recibió una llamada alertando del suceso, por lo que se personaron en La Cabezuela efectivos de la Brigada de Policía Científica para inspeccionar la zona. Hay una investigación policial activa, que aún no ha concluido.
Andalucía, la comunidad con más muertes en el tajo
La muerte de Juan Carlos viene a engrosar la negra estadística de muertes en el trabajo registrada este año en Andalucía. Durante el primer semestre, se contabilizaron 44.025 accidentes de trabajo en la comunidad y 73 fallecidos —71 hombres y dos mujeres—, trece de ellos en la provincia de Cádiz.
El Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) es quien hace públicos estos datos, que especifican que de los fallecimientos, 62 defunciones se han producido en la jornada laboral (60 hombres y dos mujeres) y los once restantes, todos hombres, en 'in itinere'.
"Esto es una barbaridad, no se puede permitir que la gente que va a buscar su pan pierda la vida como si se tratara de una guerra, así que desde el sindicato vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para evitarlo", apunta Pepe Casas, responsable de Salud Laboral de CCOO en la comunidad andaluza.
Andalucía, durante el primer semestre de 2021, fue la comunidad que más fallecidos registró a nivel nacional, con 36 fallecimientos más que en Cataluña —pese a que la región catalana tiene 300.000 ocupados más que la andaluza— y 31 más que en Madrid —las cifras de ocupación de ambas comunidades son similares—.
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