No contestaron al unísono porque había que mover los micros, pero tanto la número 1 al Congreso por Ciudadanos en la provincia de Cádiz, María del Carmen Martínez, como el portavoz en el Parlamento andaluz —donde cogobiernan con el PP—, Sergio Romero, han coincidido una vez más en restar trascendencia al cataclismo que para la formación naranja señala la última encuesta del CIS. Conocida este martes, augura una aplastante victoria para el PSOE de Pedro Sánchez y un batacazo de Cs —de 57 escaños podría quedarse en 35-27—. Un sondeo, eso sí, desdibujado por haberse realizado antes de conocerse la sentencia del ‘procés’ y de la exhumación de Franco.
“Nos preocupa la situación de los españoles, no de las encuestas”, ha replicado Martínez. “Siempre hemos tenido presente que la encuesta que hay que tener claro es la del día de las elecciones”, ha sostenido tajante Romero. El peso final de Cs en el bloqueo o no de la política española en los últimos tiempos ha ido mal que bien dándoles la razón hasta ahora. En un desayuno informativo celebrado en el restaurante Universo Santi, en Jerez, la plana mayor del partido de Albert Rivera en la provincia de Cádiz, a excepción del líder andaluz de la formación y vicepresidente de la Junta, el sanluqueño Juan Marín, ha comparecido ante la prensa para conjurarse públicamente ante el inminente arranque de una nueva campaña de elecciones generales.
Una campaña exprés antes del 10N que comienza en la próxima noche del jueves, noche de Halloween. El truco de las encuestas o el trato poselectoral que, en esta ocasión, desbloquee la formación de un nuevo Gobierno de la Nación, tras el desencuentro permanente entre PSOE y Unidas Podemos. Con Pedro Sánchez y los socialistas como prácticamente únicos culpables de todos los males de España y Andalucía, el monstruo perfecto para la víspera de Todos los Santos, Romero y Martínez han separado su intervención para, primero, evaluar el papel de Cs en el Gobierno de la Junta; y en segundo lugar, vender a la formación de Rivera como la única salida para el bloqueo estatal.
El portavoz municipal de Cs, Manuel Méndez, en el desayuno informativo. FOTO: MANU GARCÍA
“Donde está Cs se cumple”, ha subrayado el parlamentario andaluz. “Solo nosotros podemos los problemas históricos de la provincia de Cádiz”, ha insistido la candidata al Congreso, que repite en el puesto que ya ocupó en las pasadas generales del 28A. A un lado, el número 1 en la lista gaditana al Senado, Carlos Pérez; al otro, el portavoz municipal de Cs en Jerez, Manuel Méndez. "Mientras Sánchez en seis meses ha estado mirándose el ombligo y ha convocado dos procesos electorales, en Andalucía hemos trabajado y hemos hecho dos presupuestos”, ha recordado Romero, quien ha aprovechado para profundizar en las líneas maestras de las cuentas y en su peso en los proyectos pendientes en la provincia. Precisamente sobre esto ha girado la intervención de Martínez, que ha hecho hincapié en que siguen siendo “muchos los problemas históricos que tiene la provincia; y el PSOE en campaña siempre promete mucho, pero después nada”. “Aunque ahora Marlaska —candidato por Cádiz— promete pero de lejos", ironizando con la baja presencia del ministro del Interior en funciones por la provincia.
En el caso del portavoz de Cs en la Cámara autonómica, ha recalcado que frente al bloqueo de Sánchez, “está Cs, que allí donde está es sinónimo de crecimiento, reforma y estabilidad. En diez meses de Gobierno en la Junta de Andalucía se han llevado a cabo 545 medidas y dos presupuestos, un claro ejemplo de que había otra forma de hacer las cosas”. Entre cafés, zumos, bollería y sandwiches de york y queso, dos de los líderes de la formación naranja en la provincia han mantenido un largo encuentro con los medios que ha pretendido servir para ahuyentar a los fantasmas de las encuestas —en Cádiz el CIS dicta que perdería un diputado el 10N— y para encarar la campaña, que empieza en la medianoche de Halloween, sin el miedo en el cuerpo por el espíritu de un posible fracaso electoral.
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